Del sector de videojuegos dependen 8.790 empleos. El año pasado (2017) facturó 1.359 millones de euros, más del doble que los 597 millones del cine y casi seis veces más que los 232 millones de la industria discográfica.
Con esta cifra –que supuso un repunte del 16,9%–, España se situó como el noveno mercado más grande del mundo, por debajo de China (23.788 millones), EE UU (21.640), Japón (10.834), Alemania (3.781), Reino Unido (3.642), Corea del Sur, Francia y Canadá, y por encima de Italia, Rusia, México, Brasil y Australia.